Un Capitán de caballería y científico de prestigio está enfrentado a su mujer Laura a cerca de la educación de Berta, hija de ambos. El Capitán ha tomado la decisión de enviarla a estudiar la carrera de maestra a la ciudad mientras Laura quiere que la niña se quede en casa y se dedique a la pintura. Esto resulta ser una batalla a muerte: el Capitán insiste en la autoridad que le otorga su condición de padre mientras Laura, convencida de la precaria salud mental de su marido esta dispuesta a utilizar cualquier arma que tenga a su alcance con tal que no lleve a cabo esta última locura.
Laura despierta en el capitán la duda sobre la paternidad y este golpe a su masculinidad termina por trastornarle. Conducido por la desesperación acaba tirándole una lámpara de queroseno encendida a su mujer. Para el Capitán esto significa el final sin retorno.